miércoles, 25 de mayo de 2022

ESTO YA LO HABÍA VIVIDO – DÉJÀ VU

Tomada de Google

Déjà vu es la sensación de haber pasado con anterioridad por una situación que se está produciendo por primera vez. Es un término tomado del francés y que significa “ya visto, o visto anteriormente” y se conoce como una perturbación leve de la memoria (paramnesia del reconocimiento) que produce esa sensación de revivir algo del pasado.

El término Déjà vu empezó a usarse con este sentido concreto a raíz de los estudios de Émile Boirac (1851-1917), un psíquico francés que lo empleó por primera vez en su libro El Futuro de las Ciencias Psíquicas. Luego, el psicólogo Edward B. Tichener, lo explicó como una impresión rápida que tiene alguien respecto de una situación vivida, la cual se experimenta antes de que el cerebro pueda “procesar” la información conscientemente, generando una falsa sensación de familiaridad. En líneas generales, la experiencia del Déjà vu suele ser breve y diluirse tras unos pocos instantes, acompañada por una sensación de extrañeza o sobrecogimiento, y por lo general se le atribuye la experiencia “previa” de lo que se vive en un sueño, lo cual llevaría a pensar en algún tipo de premonición. Los enfoques científicos, no obstante, contrarían la idea tradicional de que un Déjà vu forme parte de una profecía o mensaje espiritual que de pronto se hace consciente, prefiriendo entenderlo como una anomalía en el funcionamiento de la maquinaria psíquica del recuerdo. La experiencia del Déjà vu es tremendamente común: dos tercios de la población mundial dicen haberla experimentado, según estudios formales.

El Psicoterapista suizo Arthur Funkhouser, dice que existen tres tipos de Déjà vu:

a.- Déjà vécu. Traduce “ya vivido” y suele estar vinculado con eventos mínimos, banales, alrededor de las cuales se teje una serie de sensaciones, produciendo el convencimiento de que eso ya se había experimentado antes.

b.- Déjà sentí. Se refiere a que es algo meramente sensorial, “ya sentido”. Se produce exclusivamente en torno a sucesos mentales y es de naturaleza interior, efímera, pues no suele ser comunicable ni perdura en la consciencia. 

c.- Déjà visité. “Ya visitado”, obviamente implica una reacción ante un lugar que se conoce por vez primera, pero que se tiene la sensación de ya haber estado allí anteriormente. Muchas personas lo vinculan por eso a la creencia de la reencarnación y las vidas anteriores, cuando no de viajes astrales durante el sueño.

Buena parte de lo expresado en los párrafos anteriores fue tomado de la Enciclopedia Concepto y todos sus contenidos pertenecen a Editorial Etecé, que están en https://concepto.de/deja-vu-2/, les recomiendo esa página, tiene muchos temas interesantes.

Eso anterior es aplicable a cualquier otra sensación olfativa, gustativa, auditiva, etc. Cualquier percepción sensorial real o imaginaria que nos lleve a pensar o a sentir que “eso” ya había pasado antes, puede considerarse un Déjà Vu.

Ya lo había vivido, también es una canción del álbum Extranjero, lanzado al mercado en 1991 por el maravilloso cantautor venezolano Franco De Vita y junto a No basta, Latino y Será, Ya lo he vivido, fue una de las más escuchadas; aquí una parte de su letra.

¿Dónde estabas? Habías ido antes por ese lugar
Creo que sí, te había visto, y no me atreví a hablar
Y como si esto fuera un sueño, te encuentro aquí conmigo,
Y parecía que ya lo había vivido...
Aquellas frases que yo ya había oído,
Aquellas manos que ya había sentido,
No, no, juro que esto ya lo había vivido,

Déjà vu es también el nombre de una película de ciencia ficción de 2006, producida por Jerry Bruckheimer y protagonizada por tres super actores: Denzel Washington, ‎Paula Patton y Val Kilmer.‎ Donde la trama explica este tema a través de los viajes en el tiempo y la manipulación de esas realidades o mundos paralelos, por parte de una agencia secreta de investigación especial. Si no la han visto, se las recomiendo. Está película da a entender que evento produjo un famoso apagón en la ciudad de Nueva York, el cual convirtió en un caos total por más de 24 horas a toda esa ciudad por la falta del fluido eléctrico.

¿Quién no ha vivido esta experiencia? ¿Cuántas personas hemos visto o conocido que creemos que ya habíamos tratado, pero en otras circunstancias de tiempo y lugar? Es mucho más común de lo que parece, empiecen a buscarlo si no lo han “vivido”. Yo en este caso vengo a escribirles sobre algo que no es una percepción, porqué realmente lo viví y lo sigo viviendo. Una situación triste, grave y muy compleja, que padecí y sigo padeciendo.

Hace más de 25 años conocí a un señor, originario de Cuba que huyó del terrible régimen de esa isla, saliendo hacia Venezuela para poder vivir con dignidad. En una conversación bastante larga, entre otras cosas, me decía que ya estaba preparando su plan para emigrar nuevamente, porque lo que se avecinaba en Venezuela, él ya lo había vivido en Cuba. Este amigo me explicó la forma como los castro fueron controlando al pueblo, el tipo de estrategias que utilizaban y el gran nivel de investigación y desarrollo que habían alcanzado en todo lo referente al manejo de las masas, al populismo, a la aplicación del miedo, el hambre como arma de control, en otras palabras, la más alta tecnología para imponer un modelo liderado por el mal. Me dio detalles de como habían destruido la educación, la libertad y tomado todos los bienes privados, así como los recursos del país, para beneficio personal y de los miembros del partido. Lo que mi amigo me explicó, fue exactamente lo que después ocurrió en Venezuela.

La insatisfacción, el manejo no adecuado de los recursos públicos, injusticia, inflación, inseguridad, el resentimiento, “la lucha de clases”, son factores que están presentes en la sociedad colombiana y es casi la misma historia y el mismo ambiente que se vivió en Venezuela, cuando ocurrió el mayor desastre político visto en esa tierra, al elegir como presidente a un resentido social como chavez, un ser dominado por los tentáculos de la izquierda comunistoide, que llamó dictador a fidel castro, pero que solo semanas después de ser electo fue a visitarlo, manteniéndose a la sombra del isleño hasta el día de su muerte; de hecho, murió en Cuba.

La desconfianza creada por los políticos demócratas de Colombia, los frecuentes escándalos de corrupción y la llamada del populismo hecha por el líder del M-19, ese grupo delictivo responsable por la muerte de mucha gente y del ataque al palacio de justicia en 1.985, sumado a la retórica del odio, de las ofertas de expropiaciones disfrazadas en una “democratización de la propiedad privada”, manipulando con el miedo, haciéndose parecer como un maltratado y que ha declarado que está bajo “amenazas de muerte”; esto último fue una estrategia utilizada por fidel castro y chavez en infinidad de veces. Además es amigo de José Luis Rodríguez Zapatero el ex presidente español, quien también desfila por todos los países controlados por regímenes dictatoriales como Venezuela y Nicaragua, dando apoyo permanente al Grupo de Puebla y al Foro de Sao Paulo , organismos del que forma parte las Farc y todos los dictadores de Latino América. Todo este "paquete" junto, es lo que ha llevado a mucha gente de este país a querer golpear la tapara, como dicen en el llano, a querer cambiar todo de forma radical, sin saber la terribles consecuencias que traería esa acción.

Tener la intención de votar por petro el próximo domingo 29 de mayo, en unos casos proviene de ese mismo resentimiento social, de las frustraciones, pero también es una especie de venganza contra Álvaro Uribe, por las supuestas muertes atribuidas a él. De que Uribe sea el responsable de haber ordenado los falsos positivos no hay una sola prueba, de haberla, estuviera preso hace rato. Pero petro si ha declarado que su dirección en el M-19 produjo muertes. En otras palabras, petro si es al menos autor intelectual de masacres contra militares, policías, políticos y de ciudadanos. Estuvo preso por porte ilegal de armas y otras acciones subversivas (igual que chavez con su fallido y cobarde golpe de estado en 1.992), el mismo lo ha declarado y lo más triste lo dice con orgullo, sin una pizca de arrepentimiento, lo justifica. Además, recuerden que fue el narcotráfico quien financió la operación del palacio de justicia y que petro tiene entre sus amigos a los principales guerrilleros, violadores y asesinos de las Farc. Piensen por un momento como sería la conflictividad política, económica y social de llegar ese ser a la presidencia. ¿Pueden imaginarse el sentimiento de los militares y policías activos y retirados, así como de los familiares de tantas personas han muerto de la mano de la guerrilla, teniendo precisamente a un guerrillero en la primera posición de poder del país?. Teniendo a un excelente amigo (yo me atrevo a llamarlo socio) de todos los movimientos armados de Colombia.    

Tristemente, a pesar de estar tan cerca, mucha gente en Colombia no cree o ignora lo que ocurre en Venezuela, de la gravedad y la magnitud de la ruina del país, así como el nivel de pobreza y hambre de la gran mayoría de su población. ¿De verdad creen que los casi siete millones de venezolanos que salieron del país en los últimos 8 años lo han hecho por placer o para probar suerte? ¿Es posible que miles de profesionales y técnicos, gente preparada en diversas ocupaciones, con casa propia y una vida hecha con esfuerzo, se hayan movido a otros países a pagar arriendos y a buscar trabajos que muchas veces ni siquiera tienen que ver con su profesión y con una gran desmejora al comprarlo con el que tenían en Venezuela? Y ni hablar de los que han salido caminando y han marchado hasta el cono sur, perdiendo la vida muchos de ellos en el trayecto. Por primera vez en la historia vemos venezolanos tratando de cruzar el rio pasar desde México a Estados Unidos.

Este ambiente que se vive hoy en Colombia es el mismo que vivimos en Venezuela en su oportunidad. Y se repite también la sordera producida por el odio o el resentimiento. Los cubanos, como ese amigo que mencioné al inicio, le decían claramente a la gente en Venezuela, no voten por chavez, si no quieren caer como los cubanos a la pobreza extrema; los venezolanos decían, NO, TRANQUILO, NOSOTROS NO SOMOS CUBA. No somos una isla donde nos puedan encerrar, además, con todo el petróleo que tenemos los demás países no van a dejar que aquí se instaure el comunismo. Igual está ocurriendo en Colombia. Muchos de los ciudadanos de este hermoso país, no creen que Venezuela está tan mal, de hecho el candidato guerrillero se atrevió a decir que Colombia está peor que Venezuela. Les invito a ver estos videos con las filas kilométricas que se hacen para poder comprar gasolina en Maracaibo Filas para gasolina 2022  y Filas Gasolina 2020 en diferentes años. Otros dicen lo mismo: No, Colombia no es Venezuela, aquí no va a llegar el comunismo. Pero hay un tercer grupo que piensa que no les importa quien llegue al poder, con tal de que se jodan los ricos. 

La riqueza de un país la genera una sociedad educada, con ciudadanos formados en todas las especialidades profesionales y técnicas que necesita, con una empresa privada desarrollada y fuerte, más libertad de expresión y de acción dentro de un marco legal y de justicia. ¿Creen ustedes que alguien que viene de la guerrilla, que incita constantemente a la violencia, un ególatra resentido puede ayudar a esta nación a llegar a salir adelante? Ese ser es de la misma estirpe de los castro, chavez, maduro, daniel ortega y ahora lópez obrador, que ya va a empezar a contratar "médicos cubanos", que son la primera oleada que usa el régimen castrista para someter a las naciones. Les agrego algo: En Venezuela no hay combustible en varias regiones y por primera vez se compra gasolina importada desde Colombia, pero el régimen cubano, recibe GRATIS todo el combustible que necesita y hasta los revende para generar divisas. Un reporte de Reuter de finales de 2021 indica que el 70% de la ventas de exportación de Venezuela van a China, como pago de deudas, mientras que se duplicó la cantidad enviada a Cuba ubicándose en unos 70.000 barriles diarios, compuesta de crudo, gasoil (acpm) y otros derivados. Esto no se justifica.   

La comediante, escritora y actriz venezolano-estadounidense, Joanna Hausmann, en el Stand-up Comedy: Venezuelans in New York, dice que ella ve esto como una abuela (Cuba) que ha cometido muchos errores y trata de convencer a su hija (Venezuela) de que no los repita, pero la hija no le para bolas y cae exactamente en lo mismo. Ahora la madre (Venezuela) está tratando de hacer lo mismo, explicar y convencer a su propia hija (Colombia), nieta de la cubana, para no cometa los mismos errores, porqué ya está comprobado lo terrible de las consecuencias.

Este Déjà vu me ha perseguido desde hace tiempo y creo, ruego a Dios que sea solamente eso, un flash de algo que en lo profundo de mi corazón deseo que no se vuelva realidad. De ocurrir, en muy poco tiempo muchos colombianos y extranjeros, estarán pensando para donde salir, pero vean que estarían llegando tarde y no hay muchos sitios disponibles para emigrar. Olvídense que Venezuela va a mejorar con el régimen actual y cruzar el Rio Grande para ir al monstruo del norte, se pone cada vez más complicado.

Les dejo esta frase que escuche una vez por allí:

“Una vaina es llamar al Diablo, pero otra muy diferente es verlo llegar" y hacerse del control de tu vida.


Eduardo J. León Hernández

Barranquilla
Mayo 24, 2.022







jueves, 12 de mayo de 2022

VASTAGOS DE MERETRICES, COMUNISMO E IGUALDAD


Foto Tomada de Internet y modificada

Etimológicamente, meretriz proviene del latín meretrix, que a su vez deriva de mereo que significa ganar, cobrar o merecer. En otras palabras, meretriz es la que cobra, la definición latina no dice que, pero luego el sustantivo traducido nos aclara por que cobra, cosa que todos sabemos.

Muchas veces realmente ellas no tienen la culpa de lo que hacen sus hijos, pero son las que llevan los carajazos y sufren las mentadas de madre; bueno, aunque hay algunas que también “disfrutan” de los horrores que cometen sus infaustos descendientes, del dinero mal habido, llevando además una vida casquivana y disoluta.  

El comunismo es el peor sistema de vida social, económico y político que quisieron inventar, unas mentes maquiavélicas, algunos vástagos de meretrices que nunca trabajaron (busquen la hoja de karl marx o de cualquier otro y verán), y digo que quisieron, porqué para mi es un sistema que NO existe. Se usa su denominación, pero no ha sido, ni es aplicado en ninguna parte del mundo y ya les explico mi porqué.

La RAE expone al comunismo como el “Movimiento y sistema político, desarrollado desde el siglo XIX, basados en la lucha de clases y en la supresión de la propiedad privada de los medios de producción”. Otros lo definen de manera un poco más amplia, siendo agregando a lo anterior “que los medios de producción estarían en manos del Estado, quien distribuiría los bienes de manera equitativa y según las necesidades”. El socialismo es la misma vaina, solo que le colocan un poco de Petrolato Blanco, para ir ensanchando la cerrada abertura de ingreso del comunismo, usando el dedo corazón, para luego lanzarnos al abismo. Socialismo y comunismo son la misma miasma. No hay propiedad privada y todo lo maneja el estado. En otras palabras, los Vástagos de Meretrices llegan al poder ofreciendo villas y castillos, controlan el poder y por medio del partido comunista, socialista o como quiera que se llame, dejan al resto del pueblo pendejo viviendo de las migajas que ellos desean regalarle.


Supuestamente en estos sistemas, la distribución de las riquezas que produce la nación, es distribuida de manera equitativa. Dicho en criollo, cada quien recibe la misma cantidad de bienes, servicios y recursos monetarios, de la misma calidad, ofreciéndoles igual oportunidad, indistintamente de su color, religión, lugar de residencia, etc. Contésteme algún petrista: alguna vez en su vida le han regalado una bolsa de papel llena de billetes?

En los países que se han definido ellos mismos como las lumbreras comunistas o socialistas, a saber, están: República Popular China, República Socialista de Vietnam, República Democrática Popular Lao, República Popular Democrática de Corea, República de Cuba y la República Bolivariana de Venezuela. Todos son gobernados por un partido comunista o socialista y en el caso de Corea, es risible lo de democrático. En todos estos países hay elecciones, básicamente para reelegir a los mismos que tienen el poder desde hace décadas y son los lideres en persecuciones políticas, desapariciones forzadas, prohibiciones a la libertad de expresión y de prensa, etc.

Irónicamente, a pesar de que el estado controla la totalidad de la economía y es esta la base de la filosofía comunista, casi todos conviven bajo un sistema de producción capitalista, manejado por su clase privilegiada y hasta se han visto en la necesidad de permitir el desarrollo de la propiedad privada en algunos sectores, puesto que obviamente el sistema no funciona y cayeron en terribles situaciones económicas, producto de la incapacidad del estado de manejar todo y su voraz corrupción.

El caso de Venezuela es el más novato, pero no por eso el menos destructivo. El socialismo del siglo 21, ha sido capaz de destruir en 20 años una de las economías más fuertes del continente americano y de mantener en el piso a PDVSA, la que en otrora fuera la segunda corporación petrolera del mundo. Venezuela tiene los sistemas económicos, educativos, de salud y alimentarios más terribles del planeta. El nivel de vida de un altísimo porcentaje de su población está muy cerca de los terribles números de Haití y de otros países como Sudán del Sur, Malawi y Burundi, catalogados como los países más pobres de la tierra. Y no exagero, hasta el pasado 16 de marzo de 2022 el salario mínimo era de US$ 1,6 al mes y hace unas semanas se aumentó a unos 28 dólares, cifra que será destruida en muy breve tiempo por la inflación, además sigue siendo un salario por debajo de los US$ 56, valor que según el Banco Mundial es la línea inferior del rango de ingresos mensuales que define la pobreza extrema.

Una encuesta realizada en 2018 por tres reconocidas universidades del país reveló, que el 64 % reportó haber perdido un promedio de 11 kilos en el último año por no poder acceder a los alimentos, el 61 % dijo haberse "acostado con hambre" y para el 90 % su ingreso "no es suficiente" para comprar los alimentos necesarios. Una de las coordinadoras de la encuesta afirmó que "80 % de los hogares presenta algún grado de inseguridad alimentaria", completando con la triste sentencia de que tenían reportes de madres a quienes les tocaba decidir a cuál de sus hijos alimentar en el día.

En las redes se ven noticias de que Venezuela ha mejorado, que se hay nuevos centros de comercio, restaurantes, que se consigue de todo en los supermercados y farmacias, pero es solo un pequeño grupo que puede hacerlo. Es una miserable burbuja mantenida por los dólares del cada vez más floreciente narcotráfico, los recursos mal habidos de los personeros del régimen y de empresarios asociados a ellos. Hay una porción pequeña que viene del trabajo de personas honradas y empresas, que trabajando muy duro cada día, se mantienen de pie, tratando de no dejar morir el país.

Otro elemento que ayuda a esa economía artificial, son las remesas que reciben muchos de quienes se han quedado, enviadas por sus hijos o familiares que han emigrado y que suman mas de 6 millones de personas. Pero, con todo el descaro de un dictador, maduro (recuerden, en minúscula siempre) declaró hace unas semanas, que son los padres de quienes se han marchado del país, quienes les envían dinero a sus hijos en el exterior. La pensión mensual de un alto funcionario de PDVSA jubilado, no llega a los 60 dólares, ¿qué puede comprar con eso?

Quienes no son venezolanos, tengan mucho cuidado con lo que leen, detallen quien lo dice y busquen pruebas; las redes y el exceso de información se ha convertido en un terrible socio de la libertad de expresión. La manera como se puede manipular todo en redes es impresionante. Y si no lo creen, busquen en la siguiente imagen algún detalle que les llame la atención, es una noticia tomada del portal Esquire.

¿Lo vieron?, yo hice la modificación en mi computador en menos de un minuto.

La gran mentira del comunismo es la distribución equitativa de los recursos. Ningún país que tenga esa orientación lo ha hecho y jamás lo hará. Reconozco que han logrado igualar a la mayoría de sus poblaciones, pero hacia abajo, todos cada vez más pobres, sin educación y salud de calidad, con constantes problemas en el suministro de agua, electricidad, gas y gasolina, más un constante bombardeo de su “ideología”. Pero lo más grave de todo es la siembra de odio, del enfrentamiento entre hermanos y paisanos.

Ahora miren como viven esos vástagos de meretrices en Venezuela, en Cuba, en China, en Corea del Norte, todos los miembros del partido comunista o socialista que detentan el poder, viven con más lujos que los capitalistas a quienes ellos insultan y detestan. En Venezuela los miembros del Narco-régimen viven como reyes, pero como se dijo antes, hay más de un 80% de pobreza crítica, el país está ubicado en el puesto 188 de los 190 que conforman el ranking Doing Business, que clasifica los países por las oportunidades para hacer negocios y ocupa el 177 entre los países con mayor corrupción, de los 180 países analizados.

Noruega, Finlandia, Suecia, Islandia y Dinamarca, son países que algunos mencionan como ejemplo de socialistas, pero realmente son democracias, con gobiernos parlamentarios. El bienestar social, que incluye salud, educación, vivienda, trabajo y placer, es financiado por el estado, pero los ciudadanos deben pagar sus impuestos, los cuales son altos y afectan a todos de manera progresiva. Sus economías son liberales, de mercado y el estado es prácticamente invisible, porque cumple con su función básica de coordinar y hacer cumplir las leyes.

El ex primer ministro danés Lars Løkke Rasmussen, dijo esto en un discurso en Harvard en 2015: "Sé que algunas personas en EE.UU. asocian el modelo nórdico con algún tipo de socialismo (...) Dinamarca está lejos de ser una economía socialista. Dinamarca es una economía de mercado".

Los comunistas ofrecen en sus campañas electorales que van a salvar a los países, a sus habitantes, ofreciéndole una mejor distribución de la riqueza, pero de manera aberrantemente populista, ofreciendo bonos y regalos, generando mayor separación de clases al aumentar el odio de los “pobres hacia los ricos”, proponiendo un mayor control del estado en los principales sectores de la economía, mostrando veladamente algunas expropiaciones, como es el caso del actual candidato amigo de la guerrilla en Colombia y hermano de maduro, castro y ortega, la democratización de la propiedad privada. Proponiendo cambios arancelarios para una producción nacional que no tienen ni la menor idea de cómo incrementar y adelantando la eliminación del sector petrolero, que aporta un 30% de las divisas al país y que de no tenerlo, el precio de la gasolina importada sería al menos 3 veces mayor al actual, que es alto. Colombia, mira esto con detalle.

La economía de estado más grande del mundo, manejada por el partido comunista chino, está sumamente clara de que sin la empresa privada no tendrían el poder económico que hoy día detentan y para muestra un botón. Según la Hurun Global Rich List, en 2021 China albergaba a la mayor cantidad de multimillonarios en todo el mundo con 1.058 personas, muy por encima de la cuna del capitalismo, con los 696 multimillonarios que residían en los Estados Unidos. Sin embargo, las libertades personales, de prensa y el respeto a los derechos humanos, si son las propias de los regímenes totalitarios.

Por último, literalmente no todos somos iguales, aunque ante la ley y ante Dios tenemos los mismos derechos y obligaciones. Cada ser humano es un ser único, algunos con características físicas y de pensamiento similares, pero individualmente especial, somos unos sin par. Esto nos hace poseedores de comportamientos y aspiraciones diferentes, de gustos y deseos muy diversos. A muchas personas les gusta estudiar, trabajar y superarse, otras son un poco más conformistas y llegan hasta donde se sienten cómodos. Un grupo quiere ganarse las cosas fáciles, sin esfuerzo; otros cometen delitos para vivir o beber y fumar y hay hasta quienes culpan a Dios y a los demás de sus desgracias. Ciertamente hay muchas personas desvalidas, que necesitan la ayuda de quienes están en mejores posiciones, pero ese es otro tema. Allí la misericordia y el amor por el otro debe privar, no hay ninguna duda, pero mantener a quien no quiere trabajar, compartir con ellos lo que se ha ganado con tesón, estudio y esfuerzo, eso si no. Compartir con otros es una decisión personal, no puede ser una imposición y es eso lo que hace el comunismo.

San Pablo en su segunda carta a los Tesalonicenses dice textualmente: “El que no quiera trabajar, que no coma”, y hago énfasis en que se refiere a quienes NO quieren, a esos que piden todo regalado, para que no se mal interprete esa frase, no a quienes no pueden, por diversas razones. Quien quiera el “comunismo” en su vida, el que quiere una vida fácil, con todo regalado y con bonos de miseria, debe prepararse a tener un nivel de vida peor al actual o a convertirse en un parasito alimentado con migajas, que seguramente será lo que les entreguen esos Vástagos de Meretrices, que hoy los engañan con sus discursos de ofidios voladores.

Eduardo J. León Hernández

 
Barranquilla
Mayo 12, 2022.

jueves, 5 de mayo de 2022

EL BUEN TIEMPO NO ES ETERNO


El mes pasado tomé varios vuelos dentro de Colombia, 10 despegues y 10 aterrizajes para ser más exactos en menos de 14 días, unos más largos que otros, volando a ciudades con diferentes altitudes y climas. En uno de ellos tuvimos una situación bastante incomoda, cuando en el último momento, ya muy cerca de la pista, el piloto abortó el aterrizaje por las malas condiciones climáticas; pero para que vean el contraste, en ese mismo vuelo tomé la imagen que acompaña este escrito.

Los vuelos tienen tres tiempos: el despegue, el aterrizaje y el de recorrer el cielo. De los tres el más peligroso es el despegue (no lo digo yo, está en las estadísticas) ese momento en el cual el avión empieza a subir, a levantar su peso usando la potencia de los motores, la dirección de las alas y la resistencia del aire, allí se va ajustando a los vientos, a la presión barométrica, a la densidad del aire, a la temperatura y en general a todos los fenómenos naturales y a los eventos propios que se pueden presentar, ya que recuerden que en esa área hay otros aviones despegando, aterrizando o taxeando en las pistas. El aterrizaje es ciertamente otro momento muy complicado y el segundo más peligroso, pero el vuelo, ya después de los 25 mil pies de altura es una fabulosa experiencia, casi siempre.

Desde que despega hasta que aterriza, el piloto necesitará ascender, descender o mantener una altitud constante; girar a la derecha, a la izquierda o mantener la dirección de vuelo, acelerar, desacelerar o mantener una velocidad constante, todas esos movimientos los percibimos y pueden afectarnos, porque sencillamente no estamos en nuestro hábitat natural y si consideramos que el 25% de las personas que viajan, pueden sufrir de Aerofobia, no es nada agradable. Un proverbio aeronáutico dice: "El despegue es opcional, pero el aterrizaje, antes o después, es obligatorio". Un vuelo puede ser retrasado o cancelado por muchas razones: meteorología, averías mecánicas, fatiga del piloto, etc. Otro proverbio que viene al caso reza: "Es preferible estar en el suelo deseando volar, que volar deseando estar en el suelo". Esto sirve para reflexionar, que cada uno decide, si vuela o no.

Para volar, cualquier piloto debe preguntarse: ¿Estoy preparado para este vuelo?, ¿Es la pista larga y sin obstáculos, o es corta y con obstáculos? ¿Está la pista bien asfaltada o es blanda y con agujeros? ¿De dónde sopla el viento y que intensidad tiene? ¿Cuál es la carga total del avión? ¿El aeródromo está a mucha altitud? ¿Es el día caluroso y húmedo o frío y seco?

Todo lo anterior escrito, tiene como objetivo mostrar solo algunas de las previsiones que deben tomarse antes de volar, lo complicado que puede ser emprender el vuelo y saber exactamente lo que se debe hacer para evitar problemas (los que son evitables, porque hay otros que desafortunamente, como muchas cosas en la vida, llegan a ser incontrolables) y lograr un vuelo exitoso, alcanzando el propósito de este y que se pueda disfrutar a plenitud. Pero esto también me permite mostrar que volar en un avión, es como conducir una empresa, donde todos los que actúan en la pista, torre de control, mantenimiento, logística, alimentación, captación y adiestramiento del personal, todos, hasta el que mide el aire de los neumáticos, juega un papel fundamental. Es por eso por lo que, en una empresa todos deben estar preparados y dispuestos, deben conocer el estado del mercado, de la economía, movimientos de la moneda, tasas de interés, como se mueve la competencia, que adelantos hay en nuestra industria a nivel mundial, cambios en leyes y normativas que afectan las operaciones. En general conocer, en más detalle algunos y de forma global otros, todos los aspectos que beneficien o pueden afectar negativamente al negocio.

Todo vuelo tiene sus incomodidades y a veces eso depende también del tamaño del avión y de la potencia de sus turbinas, pero no se debe abusar, hay límites y para eso también debemos prepararnos.

Hace algún tiempo, mi esposa y yo participábamos en un grupo de parejas de la iglesia, donde los matrimonios van a buscar a Dios y la ayuda necesaria para tratar de resolver un problema en la familia o entre los cónyuges. Normalmente eso se hace compartiendo la situación que se está viviendo, escuchando los consejos o experiencias de los demás y por supuesto, poniéndose en las manos de Dios. En una oportunidad, asistió una pareja que nos sorprendió a todos cuando dijeron “que ellos estaban allí porque querían prepararse para cuando llegaran los tiempos difíciles”; eso no se ve todos los días.

La pareja explicaba que toda su familia contaba con muy buena salud, que tenían sus necesidades materiales totalmente cubiertas, con negocios propios exitosos, hijos muy bien educados, con excelente comportamiento, con buenos estudios, con quienes compartían vacaciones y momentos de mucha calidad. Además, estaban rodeados de buenos amigos y personas amables, que no tenían nada más que pedirle a la vida y mucho que agradecerle a Dios, con quien también se sentían en paz y satisfechos por ser buenos católicos cristianos practicantes; todo esto fue dicho con mucha honestidad y humildad, se podía percibir. Pero que ellos querían prepararse para cuando llegaran los momentos difíciles, como esos “en los que un avión atraviesa una tormenta en pleno vuelo”. El salón se quedó en silencio al escuchar esas palabras.

Esto anterior aplica para todo en la vida: la familia, la universidad, las empresas, el equipo de fútbol, etc. Prepararse para los momentos difíciles es justo y necesario. Cada vez que vuelo y el avión va por encima de las nubes y logro ver esa enorme alfombra blanca con trazos celestes, junto a ese cielo azul que hace de techo y a su vez de horizonte, lo disfruto al máximo y recuerdo a esta familia diciendo eso. Y cuando viene una nube oscura, cuando empezamos a descender, al sentir las turbulencias propias del momento, cuando veo que estamos cerca de la pista y luego al tocarla, con ruidos y sobresaltos, mi mente recuerda que ya ese trayecto lo he recorrido muchas veces y que es parte de las incomodidades del aterrizaje, pero también el inicio de la gran alegría del estar en tierra. El ser humano es capaz de acostumbrarse a todo y en especial a lo bueno.

Pocos tienen la capacidad, ni el interés, para pensar en las dificultades futuras que se puedan presentar y fíjense que no digo preocuparse por el futuro, porque eso enferma. Tampoco estoy yendo en contra de esa enseñanza de Jesús, expresada en Marcos 6:34: "No se preocupen por el día de mañana, pues el mañana se preocupará por sí mismo. A cada día le bastan sus problemas", me refiero a tomar las previsiones necesarias, a cuidar lo que tenemos, a tener planes B, C y hasta D, a no malgastar lo que tenemos y recibimos. Para aquellos que son administradores de los recursos de otros o para quienes trabajan en empresas exitosas, no se dejen enganchar con el efecto de lo que yo llamo la “Gerencia Saudita”; ya se los explico con una historia.

En una ocasión, la comitiva de avance de un jeque árabe, llegó a un lujoso hotel y pidió que les reservaran los pisos 7 y 8, en su totalidad, por un período de tres semanas. La gerencia del hotel les dijo que solo podían darle todo el piso 7 y la mitad de las habitaciones del piso 8, porque ya había huéspedes ubicados en ese piso y no podían cambiarlos por ser el piso ejecutivo. Cuando le informaron al jeque lo que ocurría, su respuesta fue: “Cuánto quieren por el hotel completo para comprarlo”, una actitud soberbia a todas luces, pero es que esa gente tiene los recursos para comprar ese hotel y los demás que están a su alrededor; a eso llamo yo la cultura de la Gerencia Saudita, esa donde se piensa que los recursos son infinitos, estables; que nunca van a acabarse. Ninguna empresa o familia puede manejarse de esa forma, así tenga enormes excedentes económicos en un momento determinado, porque el buen tiempo no es eterno.

El adecuado uso de los recursos, con honestidad y buen criterio es esencial, básico, para garantizar la continuidad de cualquier familia u organización. Durante la pandemia muchas empresas y profesiones quebraron, se vieron obligados a cerrar sus puertas porque no podían cubrir los gastos fijos y los ahorros de los propietarios (si es que los tenían) no alcanzaban para mantenerse operativos, además de la incertidumbre relacionada con la duración de este fenómeno. Otras empresas renacieron o despegaron como nunca, produciendo nuevos mercados o vendiendo bienes y servicios que se volvieron indispensables para nuestra supervivencia. Quienes tuvieron la oportunidad de fabricar y vender, por ejemplo: tapabocas, seguramente hicieron una gran fortuna, así como las empresas especializadas en comunicaciones, por solo mencionar dos. Algunas de ellas sobrevivirán y crecerán al terminar la pandemia, otras desaparecerán como nacieron, si no han sido capaces de adaptarse y de ahorrar recursos, de invertirlos de forma inteligente.

Los mercados se mueven de manera inesperada. Las guerras, las catástrofes naturales y demás efectos causados por los fenómenos ambientales, una pandemia como la del Covid que “nadie esperaba”. También los inventos o creaciones, en especial las digitales, que cambian en 180 grados cualquier industria, son movidas que difícilmente todos vamos a poder prever, pero si podemos tomar algunas acciones racionales, para saber como operar cuando lleguen los tiempos difíciles, ese de las vacas flacas, porque el buen tiempo no es eterno.

Quienes tienen la responsabilidad de manejar o vigilar recursos de otros deben administrarlos de manera honesta, eficiente y con sentido común, pero además también advertir cualquier decisión errada, correcciones de asuntos que no están caminando bien o aportar ideas, mejoras y nuevas maneras de hacer las cosas, para hacer más productivo el negocio. Un buen amigo me decía en una conversación, que todos deberíamos tener una empresa o negocio, no importa si es una venta de café, chiclets y caramelos, un restaurant o un taller mecánico, alguna actividad donde nuestros propios recursos estén en el juego económico y que sean manejados por otros. Esto le daría a cualquiera, empleado o directivo, una visión muy diferente de lo que es una empresa.

Las experiencias y las turbulencias empresariales no son diferentes a las que viven en un avión. Algunos de nuestros momentos o trayectos importantes de tiempo y de la vida de las empresas son muy tranquilos, llenos de situaciones gratas, de muchas satisfacciones, no pensamos en malos ratos en el futuro y somos muchos los que decimos que al mal tiempo buena cara. Sin embargo, cuando llegan esos nubarrones y los movimientos bruscos, cuando el mercado en el que hemos invertido o trabajamos cae, les aseguro que no es muy buena la cara que ponemos. Se los digo con justo conocimiento de causa, ya que muy buena parte de mi vida y mis negocios han estado alrededor de un commodity como el petróleo, en un país donde ciertamente en los primeros tiempos los recursos se utilizaron para desarrollar su infraestructura, la educación, la salud y muchas otras cosas, pero que también fueron y son objeto de despilfarro y corrupción. 

Ojalá hubiésemos tenido la visión de Noruega, país que se inició en el negocio petrolero de manera importante apenas a finales de los años 80, con picos de producción de hasta 3 millones de barriles diarios en el año 2.000, pero que hoy solo produce unos 1,8 mbd. A Noruega no le preocupan las fluctuaciones de producción, ni la de los precios, estas variaciones no afectan de manera importante su economía; en otras palabras, no les quita el sueño, ya que cuentan con el fondo soberano de inversiones y ahorros más importante del mundo. El mismo tenía en 2.021 la bicoca de 1.340.000.000.000 de dólares, un poco más que el fondo chino, que hoy día (según el FMI) es la economía más grande del mundo y cuenta con 1.450 millones de habitantes; Noruega solo tiene 5,4 millones de habitantes, menos del 0.4% que China. Esto lo lograron los noruegos con su empeño, disciplina, trabajo y en especial, con mucha conciencia de ahorro y de inversión, en los buenos tiempos.

“Cuida de los pequeños gastos; un pequeño agujero, hunde un barco", dijo Benjamín Franklin. Un anónimo expresó: "Ahorrar no es solo guardar, sino saber gastar". Séneca fue más allá: "Compra solamente lo necesario; lo innecesario, aunque cueste un solo céntimo, es caro". El propio Jesús nos da clases de economía, ya que habiendo multiplicado de manera milagrosa panes y peces para alimentar a una multitud, pidió que recogiesen todo lo que sobró, para que no se perdiera nada; probablemente Dios le reclamó porque excedió el presupuesto o quiso guardarlos para ahorrarse un milagro más adelante.

Con todo lo anterior no quiero decir que no podemos darnos los gustos que queramos, siempre que tengamos nuestros propios recursos para cubrirlos. Tampoco es que nos convirtamos en tacaños o que no nos atrevamos a soñar con crecer, ni temer a correr riesgos haciendo inversiones o afrontando nuevos retos. Es solo que debemos estar claros que la vida y por ende los negocios, son como las olas del mar, suben y bajan, y que siempre hay que estar preparados, porque el buen tiempo no es eterno.


Eduardo J. León Hernández

Barranquilla
Mayo 05, 2.022

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