martes, 15 de agosto de 2017

INVASIONES O EXTRACCIONES.


En los últimos días hemos escuchado la palabra invasión y se ha puesto de moda. La declaración del Presidente de USA, sobre una acción militar contra el narco-régimen de maduro (siempre en minúscula), ha puesto a muchos a exponer sus ideas y principios (algunos inclusive sin tener nada de estos últimos), otros se rasgan las vestiduras del nacionalismo con mucha vehemencia y un grupo la rechaza de forma muy timorata. Pero, si te interesa, veamos como lo veo yo.

El juego político mundial es complejo, pero no difícil de entender si conocemos que hay tres grandes bloques más o menos identificados. El bloque occidental, el ruso y el asiático. Todos los países del mundo caen en este triángulo, mas por su modelo o dependencia económica que por su ideología. Ya eso de bloques socialistas o comunistas, no existe. En la práctica, así sus nombres o marquesinas contengan esa frase, los comunistas que hay, no son sino hegemonías económicas, dictatoriales o tiránicas, que nada tienen que ver con la esencia de las teorías que pregonan. Todo tiene que ver con el manejo del poder y el dinero, punto.

En el caso de Venezuela, D.T. solo ha dicho que hay la posibilidad de utilizar, en caso extremo, la fuerza para sacar a maduro y su pandilla y liberar al pueblo de la opresión de una tiranía narco militar. O es que esto último no es verdad? Todos los países del mundo con lo que Venezuela tiene relaciones diplomáticas, tienen personal que vive en el país, esa gente sufre los mismos problemas para conseguir comida, medicinas y servicios médicos. Padece la misma inseguridad e inclusive también recibe lo suyo cuando hay represión en las calles. Esas personas también tienen temor de andar como cualquier ciudadano de a pie y que la atraque un policía o un malandro (delincuente), que a la postre ya no difieren mucho. esa información se la entregan a los gobiernos de cada país.Todo el que está en Venezuela, para poder sobrevivir, debe tener una pequeña fortuna, muchos privilegios o ser un “enchufao”. Eso también lo saben los miembros de las delegaciones diplomáticas, desde hace mucho tiempo, no lo descubrieron en los últimos meses. Pero, los intereses políticos y económicos hacen lentas las reacciones.

Siendo cierta la existencia del hambre, la falta de salud y criminalidad en niveles extremos, alguien puede explicar como esto ocurre en el país con las más grandes reservas de petróleo del mundo y que recibió las más ingentes cantidades de dinero de su historia en los últimos años?. Pudieron ocurrir solo dos cosas: Se lo robaron o lo mal gastaron. Aquí pasaron las dos, además de endeudar al país. Con el agravante de que la cúpula militar y la política se juntaron al narcotráfico para hacer más grandes sus fortunas. Quien puede creer que estos individuos van dejar el poder con votos, luego de estar totalmente al descubierto en todo el mundo (bueno realmente ante la dirigencia de los gobiernos, la prensa y solo una parte de la población que nos rodea), luego de haber cometido imperdonables crímenes de lesa humanidad y de haberse burlado de un país de gente buena. Creo que no será por las buenas que van a salir.

Por lo expresado en el párrafo anterior, la inconveniencia de que continúe el narco-bochinche, del interés económico propio en un país estratégicamente necesario por sus riquezas y su ubicación geopolítica, USA y muchos otros países están interesados en ayudar a resolver este secuestro, de acabar con la toma de un bello país por parte de una banda de ladrones, terroristas y narcotraficantes. Además de cortar el paso libre de drogas desde Colombia a Venezuela, lo que ha mejorado el negocio del narcotráfico en los últimos años. Repito, no es solo USA, son muchos otros países que piensan que ya es hora de parar esto. A ellos tampoco les conviene.

Hay una información adicional sobre la droga que vale la pena señalar para entender mejor y por un instante me salgo del tema principal del escrito. Hace menos de tres años en Colombia, se señaló que el glifosato, producto químico utilizado en la erradicación de los cultivos indeseados, era perjudicial para los seres humanos y para la fauna, la decisión de no utilizarlo mas fue casi inmediata. Por tal motivo, el cultivo de la planta de coca en Colombia creció, según algunos entendidos, en un 20-25%, aproximadamente, en los dos últimos años. Si el precio de la droga no se ha incrementado significativamente en el mercado mundial, teniendo un crecimiento sostenido en el consumo, se deduce que la fluidez en el suministro ha mejorado o se mantiene funcionando muy bien. Traducción, mas siembra, mas producción de cocaína y mejor sistema de distribución, gracias a la asociación del narcotráfico mundial con el narco-gobierno venezolano. Esa fue una de las cosas que le acaba de reclamar el Vicepresidente de Usa a Santos en Cartagena. Han bajado la presión sobre la producción de drogas, permitiendo a la par incrementar la siembra de la materia prima. Esto no lo dijo yo, busquen la prensa.

Solo como colaboración hacia el pueblo Colombiano. Ordenan no usar más el glifosato en el campo, por su daño a la salud, me pregunto yo: No es mayor el daño que ha causado y sigue causando el asbesto en los techos de millones de familias en Colombia? Por qué no ordenan paralizar la fabricación, distribución y venta de este tipo de techos, tan rápido como prohibieron el uso del glifosato? Revisen la exponencialidad del crecimiento del cáncer en ese país y se sorprenderán. 

Volviendo al tema. Venezuela ha sido literalmente invadida por Cuba, Rusia, China e Irán durante la tiranía de chavez y maduro (recuerden, siempre en minúscula). En el caso de Cuba, hay al menos 25.000 funcionarios de todas las especialidades que operan en Venezuela desde hace años y son quienes han ayudado a los sátrapas del desgobierno a mantenerse. Son invasores? De esto no hay duda. El propio ministro de la defensa, se fotografió arrodillado frente a fidel castro. El innombrable llego a alzar la bandera Cubana y a decir que éramos una sola nación. Los principales en los cordones de seguridad de maduro son cubanos, no confían en nadie. Quienes hemos tenido que ir a notarías y registros, nos hemos dado cuenta del control que tienen sobre esas instituciones y ni hablar de la participación en el sector militar, electoral y apoyo a la represión hacia el pueblo. Sobre esto no voy a ahondar, es un hecho conocido, dentro y fuera del país. Solo te pregunto: Esta invasión cubana nos ha ayudado en algo?. Acaso no es necesario sacarla como sea?. Coño, es una muela podrida, que ya no se puede reconstruir, ya no hay tratamiento de conducto que valga, hay que extraerla para quitar el dolor.

El Presidente Trump, ha dicho, que de ser necesario utilizará la fuerza para llevarse a la cuerda de delincuentes que tienen secuestrado el país. No ha dicho que va a enviar tropas, además de que no es necesario, van a tomar presos a unos asesinos, narcotraficantes y violadores de derechos humanos. Muchos Venezolanos, no solo estamos dispuestos a aceptar esa ayuda, quisiéramos participar en esa acción y estoy seguro que eso es parte del plan.

Para exponer mejor lo que pienso, aquí este ejemplo. Una buena mujer, que ha sido la vecina de tus padres por más de 40 años, está en su casa, llega su marido drogado y borracho, él es un delincuente, ademas de conocido narcotraficante y empieza a golpearla. Esta acción la ha hecho ya por un buen tiempo y todos todos sus vecinos la conocen. El hecho se desarrolla dentro de los límites de su casa. A la vista de todos los transeúntes, el miserable saca un cuchillo y después de golpearla, quiere matarla a ella, ya antes ha atacado mortalmente a uno de sus hijos. En ese momento, la señora te pide auxilio a TI, si a TI mismo, te llama por TU nombre, como igual llama al resto de sus vecinos, a quienes ella ha ayudado por años, cuando la cosa estuvo buena. TÚ, viendo lo que ocurre, llamas a la policía y estos últimos no hacen nada, porque ellos hacen negocios con el tipo. Te pregunto, TÚ que harías? Tratarías de evitar que el desgraciado finalmente asesine a esa señora, quien te ha tratado como si fuera tu segunda madre, quien también muchas veces te dio de comer o te dio prestado algún dinero para pagar el autobús? Sus otros hijos, que son tus amigos, que se criaron contigo, te perdonarían que no hayas hecho algo para evitar la muerte de su madre, en esa casa que también te dio cobijo muchas veces? Podrías vivir con eso en tu conciencia?

Pero para poner énfasis en lo de la invasión, crees que le importaría en algo a los hijos de esa Buena Señora que te brinques la cerca, detengas al agresor, le des unos buenos (bastantes) coñazos y con tus propias manos, junto con algunos policías honestos que finalmente llegaron para ayudarte, le entregues a la DEA a ese asesino-narcotraficante?

No es exactamente lo que ocurre en Venezuela (la vaina es peor), ni TÚ eres el ejército de los Estados Unidos, pero creo que para salvar la vida de alguien, no existen barreras, no hay fronteras, ni hay cercas, no hay propiedad privada que valga. Según las leyes Venezolanas, el único momento en que disparar por la espalda a alguien y se puede considerar como “defensa propia”, es cuando salvas a alguien de un inminente homicidio. No después, solo es válido cuando tu acción evita el crimen. 

Para evitar la muerte y ayudar a vivir a alguien, más aun a un gran pueblo, todas las acciones son válidas, en especial, si ese pueblo, en casi su totalidad, está pidiendo auxilio a gritos, a todos sus vecinos. Dejémonos de pendejadas, saquemos a estos miserables por cualquier medio o crees que es mejor seguir sufriendo con el enemigo. Quien nos quiera ayudar, debe ser bienvenido, no pone condiciones quien se está ahogando y no termina de aprender a nadar.

He entendido con mi hija médico, que cuando te llega un paciente a una sala de urgencias, primero le salvas la vida y luego vas a lo cosmético. Creo que Venezuela está muriendo y es necesario intervenirla ya, antes de que sea tarde y solo quede tiempo para arreglar la urna.

Así pienso yo, allí te la dejo.



Eduardo J. León Hernández

Ciudad de Guatemala 
Agosto 15, 2.017

jueves, 10 de agosto de 2017

Óscar Arnulfo, un gran Amigo.

El pasado fin de semana tuve la maravillosa oportunidad de visitar la tumba y luego la capilla donde asesinaron a Monseñor Óscar Arnulfo Romero en San Salvador. No voy a contar su historia, es bastante conocida y me llevaría varias páginas hacerlo, solo voy a decirle a quien no conozca de él, que fue un hombre entregado a su pueblo, que nunca calló su voz para defenderlo, que el púlpito y los altares donde ofició, así como las calles por donde caminaba, fueron siempre el escenario de sus denuncias de atropellos de los derechos humanos y donde mostró su solidaridad hacia las víctimas de la violencia política en El Salvador. Murió en el altar de la capilla donde predicaba con frecuencia, aunque ese día, esa misa no le tocaba. Murió predicando la palabra de Dios, la única verdad que conocía, pero creo que más importante es cómo vivió, siempre actuando a favor de los demás. Era, es y será siempre un verdadero amigo, desde el lugar que Dios en el cielo le haya otorgado.

Estar en el lugar donde murió Mons. Romero y conociendo su historia, es casi imposible contener las lágrimas. Imaginar ese momento, donde un ser miserable, desde el frente de la capilla del hospital Divina Providencia, le dispara estando Mons. Romero en plena celebración, no es cosa sencilla. Debió ser horrible para los presentes, en mi mente traté de recrear ese momento y lo imagine desesperante, muy triste, desolador, ver caer a una persona que no había hecho mal a nadie, que solo había pasado su vida trabajando por y para su pueblo, un amigo de todo El Salvador, de la humanidad, de la verdad y la libertad. 

El día antes de su muerte, acaecida el 24 de marzo de 1.980, hizo un fuerte reclamo a las fuerzas armadas salvadoreñas, en especial a la Guardia Nacional y a la Policía (cualquier parecido con nuestra situación en Venezuela no es ninguna casualidad), dirigiendo sus palabras a las bases de estas fuerzas, para recordarles que estaban matando a los de su propio pueblo, les recalcaba que la orden de un hombre no podía ir contra la orden de Dios: No Matarás. En su homilía de ese día, que luego fue denominada como Homilía de Fuego, concluyo diciendo: “En nombre de Dios y de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno en nombre de Dios: Cese la represión”. (Tomado de Wikipedia). 

En la pared detrás del altar donde murió Mons. Romero hay un escrito que dice: “Nadie tiene más Amor que el que da la vida por sus Amigos”, esa frase me paralizó, literalmente me fui mentalmente a las protestas de las ciudades y pueblos de Venezuela donde tantos han caído, donde han sido asesinados, principalmente de manos de la guardia nacional y de la policía. No es fácil para uno que está afuera, buscando y luchando por otra vida, en un duro exilio, pero con la mente allá, con los de uno. Son muchos los amigos luchadores que han muerto por decir la verdad y exigir libertad. Fue inevitable voltear mi mente hacia mi propio pueblo, hacia lo triste que vive mi gente, recordar la pobreza, el hambre y la falta de libertad en la que vive y sobretodo, la barbarie y la represión de la tiranía del régimen que desgobierna a mi país.

La palabra Amigo ha seguido resonando en mi mente. La amplitud, pero también la especificidad de la misma me ha mantenido ocupado en estos días. En mi tierra todos somos amigos, bueno lo éramos hasta hace algunos años, cuando el odio sembrado por la tiranía empezó a aflorar. Ese odio inoculado en un pequeño grupo, algunos que por su condición y en otros por algunas otras características que me apena escribir, empezó a dividirnos. La palabra Amigo es una palabra divina, destaca a alguien excelso, que no tiene demoras para ayudar a quien lo necesita. Define a quien te escucha y no te critica, a quien te tiende la mano en cuanto lo necesitas, pero que tampoco duda en tratar de corregirte al conocer de ti, algún mal comportamiento.

Eso fue Mons. Romero para El Salvador y para toda Centro América, un gran Amigo, de esos que son tan irrepetibles como irreverentes, de los que no dudan un segundo para actuar cuando es necesario, de los que no callan nunca para defender lo necesario, de los que son capaces de hablar con su pensamiento, con su ejemplo y con sus escritos, aun después de la muerte.

Sería no apreciarlos a todos, colocar aquí solo algunos de los nombres de los que han caído en los últimos meses en Venezuela, en su lucha en las calles buscando la libertad, ya que la lista es larga, son más de 140 los asesinados solo en los últimos 120 días y miles los heridos y apresados injustamente. Pero si quiero destacar a los jóvenes, seres maravillosos que han crecido en esta tiranía y que conocen de libertad, sin haber tenido la oportunidad de conocer la democracia. Esos jóvenes cuya irresponsable valentía y su “deseo de vivir en libertad o morir en las calles”, como algunos lo expresaron antes de morir, probablemente con miedo, pero con un deseo de libertad aun mayor, como el de Óscar Arnulfo, los ha llevado a ser nuestros Amigos, ya que entregan su vida, por todos nosotros, para lograr un mejor país. Ellos, los caídos, tal vez no tendrán un altar con su nombre, algunos que cayeron en sitios o vías emblemáticas, seguro se les recordará por mucho tiempo; ojala que al pasar toda esta locura, al menos hagamos un muro para tenerlos siempre presentes y sobre todo, para destacar contra que lucharon. 

Pido a Dios el Altísimo, quien todo lo puede y a nuestra madre y gran mediadora María, que ayuden y protejan a todos quienes se mantienen en la lucha, entre ellos a mis amigos personales y familiares, que son parte de esa raza indomable de hombres y mujeres que tienen claro su objetivo, en estas horas tan terribles, en estos tiempos de tanta tristeza y desesperanza y que no nos dejen caer en la tentación de perder la fe. Que desde donde estemos mantengamos nuestra lucha y como nuestro querido amigo, Óscar Arnulfo Romero, seamos capaces de no callar y de siempre tener fuerzas para enfrentar esta oleada de maldad y de odio y poder alcanzar la tan deseada paz. 


Eduardo J. León Hernández

Ciudad de Guatemala
Agosto 10, 2.017

sábado, 5 de agosto de 2017

VIVIR MIRANDO POR EL RETROVISOR




Muchos vivimos la vida entre recuerdos y memorias y eso es relativamente bueno, recordar nuestra infancia, el primer colegio, el primer carro de papá, los amigos de la infancia, el primer amor, todos esos momentos gratos que al traerlos al presente, nos llenan la mente de cosas agradables, dignas de recordar.

Pero muchas veces nos llenamos de otros pensamientos, recuerdos no tan gratos y hasta miserables y torturadores, que para colmo, nos mantienen anclados al pasado. No hemos terminado de entender que el espejo retrovisor es solo para hacer un cruce en la vía o para detenernos momentáneamente y no causar accidentes.

Nuestra mente está muy mal educada, no hacemos ejercicios sanos con ella, muy por el contrario, vivimos recorriendo la misma ruta, revisando los mismos avisos, como cuando tenemos un diente roto y nuestra lengua no deja de tocarlo.

Este tipo de comportamiento hay que erradicarlo, existen diversas formas de enfrentarlo, pero está en cada uno buscar su método. Reconozco que decirlo es muy fácil y bien complicado hacerlo, yo mismo doy fe de ello, pero hay que intentarlo a diario hasta lograrlo. 

No hay fuerza humana que pueda con esa “loca”, así llama a nuestra mente alguien que leí una vez, solo otra loca puede con ella. Es así y hay que educarse, tener voluntad y constancia para “controlar” la mente. No por algo pequeño los monjes tibetanos o los samuráis, gente de valor y coraje, tienen esa capacidad de permanecer y vivir en condiciones tan agretes, solitarias y duras. Es necesario educar la mente, luchar con ella, ejercitarla para lo bueno, para saber utilizar el espejo retrovisor y que nuestros recuerdos sean positivos, alegres, que nos llenen de emoción, pero de la buena, de esa que enriquece nuestra vida.

Pensar permanentemente de lo que pudo haber sido y no fue, solo nos llena de amargura, y lo peor, no podemos cambiar nada de lo ocurrido, muy por el contrario, al traerlo al presente solo hacemos mayor y más profundo el dolor. 
         
Usa es el espejo para mirarte tú, para peinarte, para de vez en cuando verte por dentro a través de tus ojos, que son el reflejo de tu alma, para redescubrirte y reparar lo que sea necesario dentro de ti. El espejo del retrovisor, no lo uses tanto, no veas tanto para atrás, tu camino está al frente, enfócate en él, vigila tu ruta y usa a Dios como tu cinturón de seguridad, no sea que puedas chocar.


Eduardo José León Hernández
San Salvador
Agosto 05, 2.017
  

SER BUENO, ES MALO ??



El hombre es la mayor creación de Dios, es un hecho cierto y que nadie discute. Pero, de verdad lo creemos? A ver, me explico. Si somos lo mejor de la creación, deberíamos ser los seres con el mejor comportamiento, con la mejor actitud, con la mayor bondad, los buenos de la historia pues, pero parece que no lo hemos entendido o no entendemos, que eso es lo que más nos conviene. Alguien dijo una vez, si los malos supieran lo bueno que es ser bueno, el mal desaparecería.


Para esto necesitamos quitarnos la careta, debemos empezar por mostrar realmente quienes somos, no lo que tenemos. Que seamos capaces de sonreírnos con personas de cualquier “nivel social”, que reconozcamos que todos somos iguales, que nacimos de la misma forma y que algún día nos moriremos, lo que no conocemos es en qué condiciones. Lo único que nos diferencia en esta vida, es nuestra actitud ante ella,  nuestra manera de ser, eso sí lo podemos manejar y mejorar. 


En una actividad muy especial a la que asistí hace un tiempo, un amigo Jesuita nos pedía que buscáramos dentro de nosotros, que indagáramos de manera muy privada y personal, cuanto tenemos de Mosca y cuanto de Abeja. Entendiendo que la abeja busca las flores y produce miel, mientras que la mosca va a la basura y reparte enfermedades. Cuanto de cada uno tenemos nosotros ?. En el caso de estos dos voladores, es su naturaleza lo que los lleva a hacer una cosa o la otra, no tienen conciencia de sus actos, pero nosotros sí, fuimos creados con la capacidad de decidir qué hacer. Cuando puedas, mírate al espejo y pregúntate, cuanto de mosca o de abeja tienes? Como está esa combinación en tu vida?


Si preferimos producir miel, en lugar de enfermedades, entonces, parece que si vale la pena ser bueno. El problema es que no nos hemos propuesto esa tarea de tratar de dejar de ser menos infecciosos y más dulces.  Nosotros no decimos que somos buenas personas, parece que nos da pena, ni siquiera decimos que somos, solo mencionamos lo que tenemos, y no es que tener sea malo, todo el que con un sano y dedicado esfuerzo logra tener, poco o mucho, es digno de poseerlo. El asunto es que eso no es lo central en la vida y es lo que nos tiene jodidos.


Además, vivimos con muchas caretas. La careta del licenciado, del médico, del ingeniero, del rico y hasta el pobre se pone su careta. Lamentablemente la sociedad nos ha llevado a separarnos de manera terrible entre sectores que tienen y otros que no tienen. Conozco países que hasta sus legislaciones lo señalan y de esa manera sus ciudadanos son tratados. Viven en “estratos”, por lo que cada quien tiene su careta, creando desconfianza, ya que pensamos que todos los demás (o muchos de ellos) son malos, que nos quieren dañar y no hacemos nada para cambiar esto. 


Muchos ni siquiera sonreímos, somos incapaces de saludar o al menos tratar de poner la mejor cara que tenemos. Sonreír, además de ser un gesto de agrado para con el prójimo, es una de las actitudes que más nos ayuda a nosotros mismos, a nuestra propia salud. 


Ser alegre, ser agradecido, tener una actitud positiva, no son una posesión exclusiva de algunos, es una decisión que todos podemos y debemos tomar, por nuestro propio bien y como aporte a la sociedad y a nuestra propia familia.  Todos tenemos problemas, algunos con más frecuencia e intensidad que otros y no es fácil andar mostrando una sonrisa de manera permanente. No es sencillo sonreír teniendo un fuerte dolor de cabeza, pero, nos ayuda más andar con cara de amargado? 


También es importante que tengamos claridad de que ser bueno no es ser pendejo o tonto. Ayudar a los demás es esencial en la vida. Es una demostración de que realmente nos importa el otro, si nuestra ayuda es tomada con desconsideración o burla, el daño se lo hace el propio malagradecido. En la vida ser útil es lo más importante. Quien se cree más importante, normalmente no es muy útil.  


Estar alegre, agradecer y ser positivos, son la base de la bondad y practicando estos gestos, si practicándolo como cualquier deporte, concientizándonos de que debemos hacerlo, vamos ganando la “habilidad” de ser buenos. Es con nuestra actitud, con nuestro esfuerzo, que nos volvemos mejores personas.


No se nace siendo bueno o malo, hay condicionamientos familiares, culturales y sociales que nos influyen, eso también es cierto, pero cuando se toma conciencia de vida, ser bueno o malo, no es una condición preestablecida, es una decisión. 


Entonces, ser bueno, es malo?.  Tú decides.



Eduardo J. León Hernández 
San Salvador
Agosto 04, 2017   

 

LA CULPA MATA MÁS GENTE QUE LA GUERRA

Tomado de www.seamosfelices.com Hace unos días escuché la sentencia que titula este escrito y me llevó a recapacitar en cuanta culpa hay en ...